A pesar de la gran variedad de remedios que prometen eliminar el guayabo o resaca, es decir el malestar propio del día siguiente a un consumo de alcohol, los expertos recuerdan que no hay suficiente base científica para constatar que en realidad funcionan —aunque algunos alivian los síntomas— y que el único método seguro para evitarlo es beber con moderación y tomar mucha agua para evitar la deshidratación.
El alcohol es el responsable del conjunto de síntomas a los que se llama resaca o guayabo, dentro de los cuales se destaca la vasodilatación —que explica el aumento de la temperatura cutánea y el enrojecimiento de la cara—, náuseas, incremento de la frecuencia cardíaca, sequedad de boca y dolor de cabeza, entre otros.
Los remedios populares están a la orden del día cuando de prevenir o evitar estos síntomas se trata: comer antes de acostarse, tomar un café, consumir antiinflamatorios o ingerir alimentos muy grasosos, sin embargo estos no tienen ninguna base científica. También expertos aseguran que que vomitar, beber café, o consumir drogas como la cocaína no alivian la intoxicación etílica.
Cómo se produce el guayabo
Cuando se ingiere alcohol el estómago absorbe una fracción de aproximadamente el 20% del total, mientras el resto pasa al intestino delgado. Desde el torrente sanguíneo, una pequeña parte se excreta por la orina y el resto lo metaboliza en el hígado una enzima denominada alcohol deshidrogenasa.
La cantidad que el hígado metaboliza es siempre la misma y oscila entre siete y diez gramos a la hora (lo que equivale a una botella de cerveza), al margen de lo que se haya bebido.
Como el organismo sólo tiene capacidad para metabolizar una cantidad pequeña cada hora, si el volumen de alcohol que se ha ingerido supera dicha capacidad, se produce una intoxicación, lo que conocemos como borrachera, que se manifiesta inicialmente con una agradable euforia que empeora a medida que aumenta el nivel del alcohol en la sangre.
El alcohol (etílico) ente otras funciones inhibe la acción de la vasopresina, una hormona que hace que los riñones ahorren agua para aumentar la cantidad de orina. Al estar ausente, el cuerpo excreta un 10% más de lo habitual, y las meninges (tres delgadas envolturas que cubren el cerebro) son uno de los tejidos más afectados por esta deshidratación, por lo que aparece el dolor de cabeza. Aunque mucha gente piensa que el alcohol es una sustancia excitante, en realidad se trata de un depresor del sistema nervioso central.
Recomendaciones
Para prevenir estos síntomas se recomienda beber con moderación y lentamente, sin olvidar que si no ha comido, tiene una actividad física intensa o se deshidrata los síntomas podrán empeorar al día siguiente. Los expertos aseguran que el factor determinante de la resaca es la deshidratación, ya que el dolor de cabeza y otros signos, como calambres musculares, se deben a la falta de agua en el organismo.
Para mejorar los síntomas es necesario ingerir líquido en abundancia, dormir lo suficiente y, al día siguiente, comer y hacer ejercicio.
Es innegable que estas fechas, llenas de compromisos sociales, en los que resulta muy habitual beber alcohol, es difícil practicar una total abstinencia, sin embargo seguir estos pequeños consejos pueden ayudarle a disfrutar más y mejor de sus celebraciones navideñas.