Para cada empresa debe ser un pilar la seguridad presente en sus actividades diarias. En la gran mayoría de países, existen disposiciones legales en temas de horas extras y sobretiempo. La sobrecarga laboral es un tema crucial en la salud y la seguridad en el trabajo.
Los expertos en riesgos laborales insisten sobre la importancia de un buen descanso físico y de una buena distribución del trabajo en cortos periodos de tiempo.
El cuerpo humano se comporta como una máquina, y como todas, tiene una vida útil, unos límites de esfuerzo, y un mantenimiento periódico para poder trabajar de una forma óptima. Cuando esforzamos esta máquina física o mentalmente y no le damos el tiempo necesario para recuperarse, perdemos confiabilidad en su operación y a diferencia de las demás máquinas el resultado puede ser el más desastroso, llegando inclusive a la muerte.
Apartándonos de los requisitos legales, el cuerpo humano está diseñado para trabajar óptimamente siempre que se respeten las siguientes condiciones:
- El cuerpo humano debe dormir en promedio 6 horas para poder recuperarse de una extensa jornada de trabajo.
- Después de 10 horas continuas de trabajo los sentidos empiezan a disminuir su desempeño drásticamente.
- El cuerpo humano debe tener periodos de reposo durante su jornada de trabajo (Pausas activas).
- Los cambios de temperatura entre la jornada laboral desencadenan en enfermedades.
- El cuerpo humano necesita constantemente recuperar los líquidos y sales que pierde durante la jornada.
Cuando el trabajador no está en las condiciones óptimas, el riesgo de sufrir accidentes se incrementa, lo cual afecta negativamente a la empresa y su crecimiento.
Algunas recomendaciones que son útiles cuando se trata de minimizar el esfuerzo físico y evitar daños a la máquina del cuerpo humano son:
- Cuando se pueda ampliar el tiempo de entrega sin afectar las relaciones del cliente ¿por qué no hacerlo? así se realiza la labor si tanto apuro y se evitan reprocesos innecesarios.
- Organizar el tiempo, saber que trabajos son urgentes y distribuir sus recursos para minimizar el tiempo de realización.
- Evitar largos periodos de trabajo sin intervalos de descanso, evitar las largas jornadas, doble turnos entre otros.
- Respetar los días de descanso del personal, si es necesario trabajar se debe compensar con otro día en menos de una semana.
- En los trabajos con altas temperaturas, se debe dar a los trabajadores un tiempo de climatización (mínimo media hora) antes de la salida del personal para que el cuerpo repose y no presente estrés térmico con los cambios bruscos de temperatura.
- Tener en cuenta las fechas de cierre y plazos de entrega para evitar extender las jornadas de trabajo.
- Cuando surjan trabajos donde se debe realizar jornadas extensas, revisar la viabilidad de dividir al personal para hacer la labor por turnos, enviando a personal a descansar y que releve a los que se quedan en la operación.
- Cuando el personal extienda su jornada laboral, garantizarle un espacio de tiempo adecuado para poderse recuperar (8 horas entre jornadas, 2 de viaje de ida y regreso y 6 de sueño).
No hay que abusar del cuerpo humano, cuando se sobrecarga se pierde desempeño en la operación y se aumenta el riesgo de accidentes en la empresa. Recuerda:
“La máquina más valiosa de las empresas es su personal,
y por tal motivo necesita del cuidado de sus empleadores”