Cuando la vulnerabilidad te hace más fuerte

Nuestro estado de ánimo tiene mucho que ver en cómo nos relacionamos con las cosas, no podemos cambiar lo que nos pasa, pero sí la manera de reaccionar ante lo que nos ocurre, trabajando con nuestras posibilidades y oportunidades, no con nuestras limitaciones; cambiemos en nuestro lenguaje el concepto problema por el de oportunidad.

Tras doce años experimentando una terrible amaxofobia (miedo a conducir un vehículo) por un accidente de tráfico cuando estaba embarazada de mi primer hijo, no sólo he conseguido volver a conducir, sino que me compré un carro y ahora conduzco de una ciudad a otra, por cualquier tipo de carretera, como si fuera lo más natural del mundo y lo hubiera hecho durante toda mi vida. Parece increíble, ¿verdad? 

La mayoría de veces nuestro peor enemigo está dentro de nosotros mismos. Los miedos suponen una gran barrera, cuando nos asustamos no podemos desarrollar nuestras capacidades al cien por ciento. El miedo limita nuestra vida y bloquea nuestros recursos emocionales. Todos podemos superarlos.

Tenemos talentos, fortalezas y energías dormidas en nuestro interior, pero a lo largo de nuestra vida nos cruzamos con “asesinos” de sueños, esperanzas e ilusiones. Lo más importante es queen nuestro inconsciente hay dos grandes fuerzas: la que nos anula, aquella en la que residen todos nuestros pensamientos tóxicos y otra que está más oculta y es más difícil llegar, pero es la que nos ayuda a desarrollar nuestro potencial, es esta última la que debemos explotar con todo nuestro empeño.

 

 

La verdadera talla de una persona se demuestra en los momentos más difíciles. Cuando la vida nos plantea un desafío sale lo mejor o lo peor de un ser humano. Sacar lo mejor de nosotros es difícil pero es la única manera de influir en aquello que nos sucede y convertirnos en dueños de nuestro futuro.

Por supervivencia huimos de lo que nos produce dolor, miedo, tristeza, etc., aun así, el crecimiento personal tiene lugar cuando nos reencontramos con nuestras emociones en las situaciones que nos ponen a prueba.

Nuestro pasado no predice nuestro futuro porque éste lo creamos nosotros con cada decisión que tomamos hoy, ahora mismo. “La vida es como montar en bicicleta, si quieres mantener el equilibrio tienes que seguir avanzando”

Nos pueden arrebatar todo, pero jamás la libertad de elegir, de decidir nuestra actitud, nuestro camino. ¿Por qué no aprovechamos este día para decirle adiós a nuestros miedos y convertirnos en los creadores de nuestro futuro? Yo ya lo he hecho.  Nadie dijo que fuera fácil, pero la buena noticia es que no es imposible. Tú también tienes el poder para hacerlo…

"Hay dos tipos de personas que te van a decir que no puedes aportar una diferencia a este mundo: aquellos que tienen miedo de intentarlo y aquellos que tienen miedo de que seas tú el que tenga éxito." Ray Goforth